Para colmo, al final de la formación de hoy uno de los chicos me ha pedido 10 minutos para dirigirse a sus compañeros.... ninonino, ninonino (entiendase musica de suspense, que aquí nunca se sabe)
Pues bien, nos ha dicho a todos que nos quitemos el zapato derecho y cerremos los ojos, cuando los hemos abierto cada uno tenía delante un zapato que no era el suyo y tenía que decir como se sentía con él, si le gustaba o no, si compraría uno igual o no, si se sentía cómodo, etc.
La moraleja era que no siempre nos gustará lo que nos digan o nos ofrezcan en el trabajo pero que hay que adaptarse y asumir los roles que nos dan, ponernos en el lugar del otro, etc, etc, etc.
La moraleja está fenomenal pero no digáis que la gente aquí no es peculiar.
Al final del día nos dicen que no nos pueden recoger y que nos llevará al hotel el director de conecta, pues bien, por el camino nos dice que está muy complicado arreglar los papeles para poder ir a España y va y suelta Aurory "pues hijo, cualquiera lo diría"... jajajajajajaja y se ha quedado tan pancha.
Por lo demás, hoy hemos cogido un cabreo del 15 en el trabajo, pero bueno, este blog no es para hablar de eso.
Tan "emputadas" (cabreadas) estábamos que nos hemos ido a tomar una cerveza a "Palos de Moguer", al final han caido dos y una tapa y vamos las dos listas de papeles y con una risa floja que no veáis... quien me ha visto y quien me ve, con lo que yo he sido.
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